Monasterio de Suso San Millan de la Cogolla

El aceso al interior de este monastrio es a través de un espléndido arco de herradura en el que todavía se perciben los efectos del fuego provocado por Almanzor el año 1002. Dicho arco está resuelto a base de sillares sustentado por capiteles de alabastro con decoración geométrica, vegetal y figurada de grán interes para los estudiosos. La iglesia mozárabe fue consagrada el año 959, si bién posteriormente se reordenaria todo su interio
La Iglesia cuenta con doble nave y el trazado irregular de las mismas está impuesto por la forma que ofrece la roca en al que se asienta todo el edificio. La parte mas antigua se localiza al fondo, donde aparecen tres cuevas excavadas en el monte. En una de ellas, la central, se dispone el sepulcro del Santo, donde hay también un altar formado por un tiple arquito.

Otra de ellas se supone que corresponde a la estancia a la que San Millán se retiraba para orar. Desde el siglo X los espacios que conforman el monasterio pasaron a custodiar los cuerpos de importantes personajes nobiliarios, tales como el infante don ramiro, los Ayalas de Vitoria, los Tellos de Cameroso los cuerpos de los siete infantes de Lara Durante un largo tiempo el altar principal de este monasterio estaba presidido por dos puertas a la manera de retablo con sendas caras decoradas por encantadoras viñetas estructuradas a la usanza de los tebeos. Pintadas en el siglo XIV, y por tanto góticas, alcanzan un gran vigor narrativo, hoy están depositadas en el Museo de La Rioja
